martes, 21 de octubre de 2008

"Asignatura pendiente"

Otra vez recurro a Garci para realizar una nueva entrada en el blog. Ayer me volví a matricular en la UNED de las asignaturas de primero que me faltaban y las pendientes del año anterior. De hecho, realizando la matrícula (in situ pero en la distancia de una mesa y un ordenador con dos pantallas), me daba cuenta que tenía otra "asignatura pendiente", que no era sólo nominal. Me explico. El año anterior me había matriculado de seis, de las cuales había aprovado tres, una no me había presentado y dos las había suspendido con un 4,8/4,9. Todo esto sin estudiar ( o, al menos, sin demasiado tiempo dedicado a ello). Fue entonces cuando descubrí mi otra asignatura pendiente: la constancia.
Nunca he sido demasiado constante y siempre he basado la fuerza de todo lo que hacia o me ocurría en el ahora, sin una planificación, sin una organización previa. Pero hasta ese momento (o, tal vez antes, si nos ponemos a pensar), no me había dado cuenta de lo importante que resulta para la obtención de objetivos concretos y personales. Pero, por encima de todo, para el control de tu vida, para tirar adelante con ella, sin que esta te domine. Pensar, recapacitar y ser fiel a tus ideas, forma parte del concepto de la constancia. Y eso fue lo que me vino a la cabeza, mientras dictaba los códigos de las asignaturas que cursaré este año.
Al regresar a casa, la idea me seguía dando vueltas en la cabeza y pensaba en Garci (nadie creera lo de la primera entrada de este blog) y me venía imágenes difusas y lejanas, de la película, que me provocaban la búsqueda de otras asignaturas pendientes, viniéndome a la mente personas, acciones y fragmentos de un pasado sin cerrar, mostrándome otra de las asignaturas pendientes: saber guardar el pasado (aunque sea "en un grano de arroz, dentro del estómago de un pez, que es tragado por una ballena, que a su vez se encuentra nadando en la lava de un volcán, en una isla desierta, protegida por un mosntruo de dos cabezas,....") para poder vivir en el presente.
En ese momento me dí cuenta, que se deben cerrar puertas al pasado, que aquello que abres alguna vez, debe ser cerrado, para que no vuelva a aparecer o, al menos, para reconocer que fue hermoso aquello que viviste o hiciste.
Por todo esto, continuaré en la UNED hasta que acabe.

1 comentario:

Alfredo Ruiz Sánchez dijo...

La constancia es la asignatura pendiente de muchos, entre ellos la de un servidor. No es que sea una veleta y me falte seriedad, pero reconozco que a veces se me hace cuesta arriba hacer ciertas cosas, sobre todo las que no me gustan.

Sobre cerrar el pasado, es importante ir cerrando etapas, sobre todo, otra vez, las que no nos han gustado, o aquellas que habiéndonos gustado no se pueden recuperar ("Fue bonito mientras duró"). Hay muchas cosas del pasado que me gustaría recuperar, pero no deja de ser una pérdida de tiempo anclarse en ellas y no avanzar por el presente camino al futuro.

Solo te digo para concluir, que mucho ánimo. Que te agarres a lo que tienes ahora mismo, por poco que sea y camina firme para que el futuro sea un muy buen futuro.

Un abrazo